Esto me ha dejado en shock

El hotel sorprende por su ubicación cercana a la estación de Paddington. Sin embargo, las habitaciones son muy pequeñas y la limpieza dejó mucho que desear. encontramos residuos y el baño era incómodo. A pesar de disfrutar de nuestras noches, no hay duda de que la experiencia necesita mejoras significativas.

La ubicación es muy conveniente, especialmente por estar cerca de

la estación de Paddington, lo que facilita el transporte. Disfruté de la limpieza y el confort de la habitación, aunque el espacio podría ser mejorado. El desayuno es básico pero cumple su función, aunque echo de menos algunas opciones de fruta.

Las ventanas estaban muy sucias.

La ubicación es realmente conveniente, ya que se puede llegar rápidamente a Victoria Station y hay acceso fácil a varios puntos turísticos como el Palacio de Buckingham y el Museo Británico. Lo que más disfruté fue el desayuno, que aunque era básico, estaba bastante rico. La habitación, aunque pequeña, estaba bien decorada y había té y café de cortesía, lo cual fue un buen detalle. Sin embargo, la limpieza dejó un poco que desear, ya que encontré algunos detalles que necesitaban atención.

Me encantó que la habitación estaba bien decorada y tenía un ambiente acogedor. Además, disfruté de la limpieza del lugar, lo que me hizo sentir cómoda. La ubicación, cerca de la estación, también fue un gran punto a favor.

Escaleras un poco complicadas para personas mayores.

ubicación cercana a transporte, baños recién remodelados, habitaciones sin moqueta

La limpieza en las habitaciones fue deficiente!!! Necesitan prestar atención al suelo, a las toallas y a los detalles de mantenimiento. ¡No puede ser que haya que quejarse por sábanas sucias y ruidos constantes de otras habitaciones!!!

Me sorprendió lo cómodo que resultó el hotel, especialmente las camas que estaban bien acolchadas y listas para descansar después de un día ajetreado. Aunque el desayuno era básico, me pareció muy agradable disfrutar un té por la mañana acompañado de una buena charla en el comedor. Solo noté que en ocasiones había un poco de ruido en el pasillo, pero eso no arruinó mi experiencia. 👍

Estancia mejorable pero con buen potencial

El hotel se encuentra en una buena ubicación, cerca de la estación de Paddington, lo que facilitó nuestra llegada. Sin embargo, las habitaciones son algo pequeñas y la limpieza debe mejorar. Un consejo, asegúrate de verificar el estado de la habitación al llegar.

El hotel White House tiene una ubicación excelente, muy cerca de la estación de Paddington y de tiendas y restaurantes. La habitación era igual a las fotos y siempre estaba limpia. Además, me encantó que tuviéramos té, café y leche de cortesía en la habitación.

Lo recomendaría, pero deberían mejorar la limpieza del hotel.

la ubicación es ideal, en un área agradable, cerca de muchos puntos turísticos. el desayuno fue sencillo pero perfecto para empezar el día y el personal fue muy amable.

el internet no funcionaba bien, lo que fue un poco frustrante. 😕

La ubicación del hotel es conveniente, cerca de transporte público. Sin embargo, las habitaciones son muy pequeñas y noté fallos en la limpieza, como polvo en los muebles y un baño que necesitaba atención. Aunque el personal fue amable, la experiencia en general sugiere que hay áreas que requieren mejoras.

La habitación tenía té y café de cortesía, lo cual es un buen detalle. Sin embargo, la limpieza fue insuficiente y encontramos manchas en las colchas y polvo en los muebles.

La habitación era pequeña pero acogedora. Tenía un ambiente cálido y me sentí cómoda. La limpieza me pareció un punto fuerte, siempre estaba todo en orden. Uno de los momentos más destacados fue cuando mi hija se enfermó y el hotel tuvo una atención excepcional al no cobrarnos por las sábanas manchadas, lo cual realmente aprecio. El desayuno era básico, solo pan, jamón y cereales. Sin embargo, el personal fue muy amable al permitirnos quedarnos un poco más. A pesar de contar con un buen trato y un entorno acogedor, las habitaciones necesitan mejorar en espacio y en insonorización. Escuchamos bastante ruido de los pasillos y de otras habitaciones, lo cual afectó un poco nuestra tranquilidad. Pero en general, la experiencia fue bastante positiva.

La habitación tenía té y café de cortesía, lo cual es un detalle agradable. La decoración del vestíbulo era atractiva en invierno, con una atmósfera festiva.

Las habitaciones eran muy pequeñas y se escuchaba todo lo que sucedía en los pasillos y en otras habitaciones, lo que puede resultar incómodo para quienes buscan tranquilidad. Las escaleras eran estrechas y poco accesibles, en especial para quienes llevan mucho equipaje o tienen un poco de edad. El desayuno se servía en un hotel contiguo, lo que añade un inconveniente adicional, especialmente cuando uno busca comodidad por las mañanas.